Investigado y encausado

Encontrarse en la posición de investigado o encausado puede generar una profunda sensación de incertidumbre y angustia. De repente, usted se convierte en el foco de una maquinaria cuyo funcionamiento interno resulta desconcertante para quien no está familiarizado. Tenemos como objetivo desentrañar las claves de este proceso, ofreciéndole pautas, características y recomendaciones para afrontarlo.

Investigado y encausado

Es crucial comprender que la designación de una persona dentro de un procedimiento penal no es estática. Inicialmente, ante la sospecha de la comisión de un delito, la autoridad judicial o policial puede iniciar una investigación. En esta fase primigenia, la persona contra la que se dirigen las primeras pesquisas suele denominarse investigado. Esta condición implica que existen indicios, más o menos sólidos, que apuntan hacia su posible participación en un hecho delictivo.

A medida que la investigación avanza y se recaban pruebas, la situación del investigado puede evolucionar. Si el juez de instrucción considera que existen motivos suficientes para continuar el procedimiento penal contra usted, dictará un auto de procesamiento. En este momento, usted pasa a ser formalmente encausado o procesado. Esta decisión judicial implica que se le atribuye la presunta comisión de un delito y se abre la fase de juicio oral, donde se valorarán las pruebas y se determinará su culpabilidad o inocencia.

Es importante señalar una excepción relevante: en los delitos privados, como las injurias o calumnias, la identificación del investigado debe ser precisa desde el inicio, con la presentación de la querella por parte del ofendido. Esta designación inicial, salvo circunstancias muy específicas, se mantendrá inalterable durante todo el proceso.

Características fundamentales de la condición de investigado y encausado

Ser investigado o encausado conlleva una serie de derechos y obligaciones que usted debe conocer para poder ejercer su defensa de manera efectiva. Entre las características más relevantes, destacan:

  • Derecho a la información: Desde el momento en que se le atribuye la comisión de un delito, usted tiene derecho a ser informado de los hechos que se le imputan, así como de los derechos que le asisten, entre ellos, el derecho a guardar silencio y a no declarar contra sí mismo.
  • Derecho a la defensa: Este es un pilar fundamental del proceso penal. Usted tiene derecho a designar un abogado de su confianza para que le asesore y represente desde el inicio de la investigación.
  • Derecho a proponer prueba: Usted tiene la facultad de solicitar la práctica de diligencias de investigación que considere relevantes para su defensa, como la declaración de testigos, la presentación de documentos o la realización de peritajes.
  • Obligación de comparecer: Dependiendo de la gravedad de los hechos y de las circunstancias del caso, el juez puede citarle a declarar en diferentes momentos del proceso. Es fundamental cumplir con estas citaciones, ya que su incomparecencia injustificada puede acarrear consecuencias negativas.
  • Posibilidad de medidas cautelares: Durante la investigación y el procesamiento, el juez puede acordar la adopción de medidas cautelares para asegurar su presencia en el juicio, evitar la destrucción de pruebas o proteger a la víctima. Estas medidas pueden incluir la libertad con cargos, la obligación de comparecer periódicamente en el juzgado, la prohibición de salir del territorio nacional o, en casos extremos, la prisión provisional.

Pautas y recomendaciones para afrontar la situación

Enfrentar una investigación o un procesamiento penal es una experiencia desafiante. Sin embargo, existen una serie de pautas y recomendaciones que pueden ayudarle a transitar por este proceso de la mejor manera posible:

  • Busque asesoramiento legal inmediato: Lo primero y más importante es contactar con un abogado penalista con experiencia. Su abogado será su principal aliado, le explicará sus derechos, le asesorará sobre la mejor estrategia de defensa y le representará ante los tribunales. No demore en buscar su ayuda.
  • Coopere con su abogado: Mantenga una comunicación fluida y honesta con su abogado. Proporciónele toda la información relevante sobre los hechos que se investigan. Confíe en su criterio y siga sus indicaciones.
  • Guarde silencio si se lo recomienda su abogado: En muchas ocasiones, especialmente en las fases iniciales de la investigación, su abogado puede aconsejarle que no declare ante la policía o el juez. El ejercicio del derecho a guardar silencio es una garantía constitucional y puede ser crucial para proteger sus intereses.
  • No intente obstaculizar la investigación: Cualquier intento de ocultar pruebas, influir en testigos o eludir la acción de la justicia puede agravar su situación procesal. Coopere con las autoridades dentro de los límites que le aconseje su abogado.
  • Mantenga la calma y la paciencia: Un proceso penal puede ser largo y complejo. Es fundamental mantener la calma, confiar en su defensa y tener paciencia. La ansiedad y el estrés pueden dificultar la toma de decisiones racionales.
  • Reúna toda la documentación relevante: Cualquier documento, correo electrónico, mensaje o cualquier otra prueba que pueda ser relevante para su defensa, recopílela y entréguesela a su abogado.
  • Sea discreto sobre su situación: Evite comentar los detalles de su caso con personas ajenas al proceso. Sus comentarios podrían ser malinterpretados o utilizados en su contra.
  • Cuide su salud mental y emocional: Enfrentar un proceso penal puede tener un impacto significativo en su bienestar emocional. Busque el apoyo de familiares, amigos o profesionales de la salud mental si lo necesita.
  • Confíe en el sistema de Justicia: Aunque pueda parecer difícil en estos momentos, confíe en que el sistema de justicia, con todas sus garantías, buscará la verdad y actuará conforme a la ley.
  • Prepárese para diferentes escenarios: Su abogado le informará sobre las posibles evoluciones del proceso y los diferentes escenarios que podrían presentarse. Estar preparado mentalmente para estas posibilidades le ayudará a afrontar la situación con mayor fortaleza.

La Importancia de la defensa y la presunción de inocencia

Es fundamental recordar que, hasta que no exista una sentencia condenatoria firme, usted goza de la presunción de inocencia. Esto significa que no está obligado a probar su inocencia, sino que es la acusación quien debe demostrar su culpabilidad más allá de toda duda razonable.

Su derecho a una defensa efectiva es esencial para garantizar un juicio justo. Su abogado trabajará incansablemente para proteger sus derechos, analizar las pruebas de cargo, proponer pruebas de descargo y presentar los argumentos legales más sólidos en su favor.

Investigado y encausado

Encontrarse en la posición de investigado o encausado es, sin duda, una experiencia difícil. Sin embargo, comprender el proceso, conocer sus derechos y contar con el asesoramiento legal adecuado son pasos fundamentales para afrontar esta situación con la mayor fortaleza y la mejor estrategia posible. Recuerde que no está solo y que tiene derecho a una defensa justa y efectiva. Confíe en su abogado, mantenga la calma y no pierda la esperanza.

En Álvarez Abogados Tenerife somos expertos en Derecho Penal, Derecho Procesal y otras ramas del Derecho. No lo dude y contacte con nosotros, le ofrecemos orientación, asesoría y defensa de manera profesional y personalizada. Estamos para darle solución a sus problemas legales.

También le puede interesar:

CONSÚLTENOS AHORA:
COMPARTIR EN REDES SOCIALES:
Picture of Alvarez Abogados Tenerife

Alvarez Abogados Tenerife

Abogados en Tenerife desde 1954. Cientos de clientes cada año no deben estar equivocados. Desde El Médano, Granadilla de Abona, Tenerife Sur, ofrecemos asesoramiento jurídico y defensa legal en Canarias.